Se han puesto en boga los departamentos de bioética en el mundo civil vinculado con la vida. No es un espacio exclusivo de la medicina sino de la vida y esta a su vez se relaciona con todo. Con el advenimiento de las éticas aplicadas en el último tercio de la década de los noventa se empezó a hacer conciencia de la importancia de la ética en los escenarios de la vida.
Así toma auge la ética de la empresa, la psico ética, la eco ética, las éticas públicas, entre otras y la bioética ha servido de emblema de ellas. En las empresas, los bancos, la administración pública, los sistemas educativos, de salud, hoy las administradoras de riesgo de salud, los modernos sistemas de seguridad social hablan de los aportes de la ética a los servicios que prestan los cuales cada vez se diversifican mas, tanto que ya nacen y urgen los departamentos de ética o bioética.
Pero que son, para que sirven y como se estructuran? Son instancias coordinadoras de servicios relacionados con las prestaciones que se ofrecen y que responden a un mismo mandato moral pero que se expresan de manera diferente en los distintos escenarios.
Si tomamos algunos ejemplos podría clarificarse más. El sistema educativo desarrolla sus programas de educación en valores, moral y cívica, formación humana y religiosa, forma comités de ética estudiantil y ya todo esto requiere de una fundamentación orquestada en cada caso para poder dar los servicios con argumentaciones plurales propias de un mundo globalizado con incertidumbres morales.
Un hospital no basta con que tenga comités de bioética clínica y de la investigación sino genera una cultura ética para todos sus miembros y ellos conlleva tareas educativas, consultivas y deliberativas donde todo el personal se involucre y ello conlleva una coordinación profesional del área de la ética que se enmarcan en los departamentos de ética.
Los sistemas de seguridad social están abocados a que sus componentes se miren desde el espejo de la bioética tanto en la calidad de servicios de bioética a través de los prestadores de salud, con los comités, los consultores en bioética clínica, el componente educativo para el personal y el impacto de todo su quehacer en el territorio nacional debe ser implementado desde un departamento de bioética o de ética
Así podrimos seguir dando ejemplos que podrían llenar varias páginas pero solo queremos evidenciar las necesidades y reiterar que el país tiene profesionales listos y con formación académica en nivel de magister que están en capacidad de solventar dichas necesidades en la medida en que se suscite la demanda.
Un departamento de ética se hace cada vez más necesario en el mundo plural que vivimos, pero cada vez se requiere de un cuerpo profesional que lo haga. Ya el tiempo en que se decía que la ética no se estudia y que todos sabemos de eso paso, ahora es una especialidad de dos años de duración con grado académico y el país tiene a más de un centenar de esos con los grados de especialistas y de magister.
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